Colombia ha establecido una amnistía fiscal para aquellos activos en el extranjero que hayan sido omitidos en las declaraciones de impuestos nacionales, así como para los pasivos inexistentes (pasivos declarados con el único fin de minorar la carga tributaria).
Así pues, tal y como se establecen en los artículos 35-39 de la Ley 1739 de 2014, los residentes fiscales colombianos tienen un plazo de dos años (hasta 2017) para regularizar su situación.
Esta obligación tributaria establece un impuesto complementario de normalización de bienes en el extranjero con una tarifa escalonada: un 11,5% para las declaraciones efectuadas durante el año 2016 y un 13% para aquellos que regularicen su situación en 2017.
El gobierno colombiano no permite acogerse a la amnistía fiscal si:
- El residente fiscal colombiano está siendo investigado por la hacienda colombiana
- Los activos proceden de actividades ilícitas
Por último, una vez declarados, los activos se integrarán en el patrimonio del contribuyente a todos los efectos fiscales.
